martes, 6 de noviembre de 2012

Galletas caseras con mermelada de fresa y yogur con ciruelas

¡ Un postre de gran presencia,
que no pasará desapercibido
en vuestras mesas !

 
Material:
Para 4 personas
 
Para las galletas: Aproximadamente, salen unas 15 galletas (tipo María). No detallo las cantidades en peso exacto, creo que para esta receta no es estrictamente necesario, lo hice a "ojo" y salieron. Así que no tengo ninguna duda de que a vosotros también os saldrán.
 
- 3 Cucharadas de mantequilla (generosas)
- 5 Cucharadas de azúcar glas
- 6 ó 7 Cucharadas de harina (en manos a la obra, veremos si necesitaremos más)
- 1 yema de huevo (mediano)
- Azúcar normal (que utilizaremos para espolvorear)
 
Para el resto:
 
- 2 Yogures cremosos (tipo griego)
- Mermelada de fresa
- 3 Ciruelas
 
Manos a la obra:
 
En un bol incorporamos la mantequilla, el azúcar glas, la harina y la yema de huevo.
Con una mano, lo mezclamos todo y vamos amasando enérgicamente, hasta conseguir que la mezcla se despegue del bol fácilmente. Es interesante dejar la otra mano libre, sin mancharla demasiado, porque si vemos que la mezcla no se despega ni coge forma de masa, podremos añadir harina a poquitos hasta conseguir el resultado deseado.
Es una masa que al principio es muy pringosa, pero cuando la tenemos ligada, queda una textura (para entendernos) más o menos como plastilina suave. No hace falta estar tres horas amasando, para conseguirlo, es un proceso rapidito!
Una vez la tenemos, la dejamos reposar 15 minutos, más o menos. Mientras, precalentamos el horno a 180 ºC.
Cuando haya reposado, disponemos en el mármol de la cocina una hoja de papel de horno. Ponemos nuestra masa encima y tapamos con otra hoja de papel de horno. Con un rodillo (si no tenéis, os puede servir una botella de vidrio vacía), extendemos la masa.
Con un molde o un cuchillo formamos nuestras galletas y las vamos colocando en una bandeja de horno. Es importante que untéis la bandeja con un poco de grasa (mantequilla o aceite), para que no se peguen. Pero lo más práctico y mancha menos, bajo mi punto de vista, es el papel de horno, lo ponéis directamente en la bandeja, encima las galletas y listo!. Espolvoreamos un poco de azúcar normal por encima de cada una.
Las puntas de masa que os sobren, las volvéis a moldear y estirar, así lo aprovecharemos todo.
Metemos en el horno, 10-15 minutos a 180ºC. Hasta que estén doraditas, pero ¡Ojo! cuando empiecen a tener color, no perderlas de vista, porque del dorado al quemado es cuestión de poquísimos minutos!!!!!!
Las sacamos del horno y las dejamos enfriar (en caliente, salen blanditas, pero cuando se enfrían, endurecen).
 
Ahora sólo nos queda preparar el yogur:
Si no es azucarado, le podéis añadir azúcar a vuestro gusto. Volcamos los dos yogures en un plato o bol. Pelamos dos ciruelas y las troceamos en cachitos pequeños, las incorporamos al yogur y mezclamos. Reservamos.
Con la ciruela que nos queda, la lavamos bien, y sin pelarla, hacemos unos gajos para decorar. Reservamos.
 
Con la mermelada, no hace falta hacer nada, sólo abrimos la tapa del bote y...ya podemos montar nuestro postre!
 
Presentación:
 
En medio de un plato disponemos una galleta untada (generosamente) de mermelada, montamos encima otra galleta, volvemos a poner mermelada y acabamos con otra galleta. Bañamos alrededor de las galletas con nuestro yogur con ciruelas y ponemos un poquito encima de ellas (eso nos ayudará a mantener derechos los gajos de ciruela). Acabamos con dos gajitos de ciruela (por persona) encima de las galletas, cómo si fueran la guinda del pastel!!!!
No sé si está explicación está muy clara, pero como dicen que "una imagen vale más que mil palabras", seguramente la foto os ayudará más...
 
¡ Buen provecho !













3 comentarios: